miércoles, 20 de octubre de 2010

20. Miedo

-Muy bien, Selena abrázate a ti misma  y mira al objetivo… así, muy bien.
El flash de la cámara me ponía nerviosa. No me importaba que saliera en las revistas, (bueno quizá sí), y tampoco lo que pensaran de mí, pero que alguien me parase por la calle o una avalancha de chicas se me tirara encima me mataba. No quería destacar. Podría haber sido una actriz fracasada, que no consigue destacar, a la que le niegan todo por su poca popularidad… no. Era popular y fuerte. Destacaba. ¡¡¡AAAA!!! D-E-S-T-A-C-A-B-A.  Intenté disimular en la sesión de fotos.
-Fantástica-me alabó el fotógrafo-eres muy natural.
-Es que no estoy acostumbrada a esto.-dije riéndome nerviosa.
-Lo estarás-dijo Carmen poniéndose a lado del fotógrafo con una botella de agua en la mano-¿tienes sed?
-Sí-dije cogiendo la botella.
Le di un largo sorbo. El trabajo era realmente cansado. Carmen me había conseguido un tutor y todo. Me estaba dando caña, como nadie los había hecho. Bueno, sí quieres ser una estrella…
-Vamos, que ya hemos terminando-se apresuró a decir Carmen-tenemos que ir a grabar el anuncio.


Mierda. Qué suave es. Me habían puesto un abrigo súper gordo, y allí hacía calor, aunque fuera hiciera un frío que pela. Aunque seguro que no se notaba en la grabación que estaba sudando como un pollo.  Encima tenía que rodar el anuncio con el imbécil de Ángel. Si lo llego a saber…
-Vamos, la grabación es en la calle-me dijo Carmen.
-¡Bien!-dije bajito.
Por lo menos no iba a seguir asándome en el vestuario. Salimos afuera y me sentí un poco menos acalorada.
-Bien, Selena, camina-me indicaron.
Con los brazos extendidos empecé a caminar. Él estaba parado. De espaldas a la cámara le saqué la lengua. Tenía que dar una vuelta sobre mis pies para que se viera la marca del abrigo y las botas. Luego me paré delante de él y le abracé.
-¡Te has tropezado! ¡se repite!
Maldita voz asquerosa. No me había tropezado. NO puedo salir más perfecta de lo que soy, no doy más de mí.
-Lo siento-dije volviendo a donde estaba.
Otra vez, pasos, vuelta, abrazo.
-¡Mal, mal, mal! ¡Repítelo!
-Sí…
-¡Otra vez! ¡Otra vez!
De nuevo los mismos pasos. Entonces pensé en mi madre. Ella había sido una diosa de la actuación. Miles de premios, dos óscar a la mejor actriz.
-Descansemos-dijo el director del anuncio- ¿por qué no puedes hacerlo bien?
-Lo siento-dije.
-Sele, ¿qué te pasa?-me preguntó Ángel.
-Nada-le dije-es sólo que me siento algo cansada.
-Será eso-dijo molesto- ¿qué coño te pasa, me lo quieres contar?
-¡Qué tengo miedo!-le grité.- ¡MIEDO! ¡Joder!
Me di la vuelta y eché a caminar lejos de él. Carmen me siguió preocupada mientras em ofrecía un vaso lleno de chocolate caliente.
-Cariño, tranquilízate.-me dijo abrazándome- no tienes nada que temer.
-Sí-dije obstinada-soy una inútil.
-¿Y eso a que viene?
-Soy una fracasada, no sirvo para nada. No soy capaz de dar dos pasos bien y una simple vuelta. Soy una actriz mediocre.
-Sí, lo eres.-dijo Carmen de repente soltándome.
-¿Qué?-exclamé patidifusa. Menudos ánimos…
-Lo eres, porque una auténtica estrella no se tiraría por los suelos por un simple fallo. Creo que me equivoqué contigo. No me sirve una estúpida marioneta. Las marionetas no alcanzan la fama.
-¡Yo no soy una marioneta!-le grité enfadada.
-Demuéstralo-me retó.
La miré desafiante y volví a donde estaba Ángel. Este me miró patidifuso.
-¡DIRECTOR!-grité-quiero seguir.
-Pero Selena…
-¡Vamos! Tenemos que terminar hoy el anuncio, ¿no?-dije sonriendo.
Sí. Fuerza. Eso era todo lo que necesitaba. Y me la daba mi madre desde el cielo. Me puse en posición y di dos pasos como si caminara por la alfombra roja. Con glamour y elegancia, di una vuelta sobre mí misma como si estuviera volando y me dejé caer en los brazos de Ángel. Respiré el aire fresco y le miré a los ojos.
-¡Corten!
-¿Ya?
-¡Sí!!! Ha quedado perfecto, a ver si la próxima lo hacemos a la primera, ¿Eh?-me regañó el director.
Di un salto y le di un fuerte abrazo a Ángel. Él soltó una carcajada. Cuando me di cuenta de lo que estaba haciendo, solté un grito y me separé de él mirándole amenazadoramente.
-Ni se te ocurra pensar…-le advertí.
-Qué poco confías en mí…-suspiró-después de aquél beso…
-Haz el favor de cerrar la boca-le regañó Carmen-la prensa rosa tiene ojos en la nuca y oídos en todos lados.
-Eso-dije feliz y enseñándole la lengua infantilmente.
-Pero si te das el lote con todos-me acusó. (¡Cabrón!)
-Eso es mentira. Tengo novio.
-Que es otro diferente al de la revista, ¿Verdad?
-Eso no tiene nada que ver. El otro me puso los cuernos.-dije fingiendo enfado.
-¿Los cuernos? Oh, vaya, que buen chisme para contar…
-Cómo te atrevas…
-Está bien…-se rió él.-pero dime que puedo invitarte a un refresco.
-Tú estás mal. Después de acosarme como me acosaste el otro día…-le espeté.
-Sólo fue un beso-dijo quitándole importancia.
-Cómo se lo diga a mi novio te parte la cara-le amenacé.
-Qué buena exclusiva; el novio de Selena Ortiz Nice le parte la cara al famosísimo y guapísimo actor Ángel Artejo… gran desgracia y mucha polémica…
-Eres un plasta peliculero-le dije riéndome.

3 comentarios:

  1. jajajajaja Angel tiene mucho sentido del humor xD Selena podria ser un poco mas amiga suya en vez de acusarle tanto xD

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  2. ajaja me hizo gracia el final XD parecen 2 niños pekeños, peroooo... ayayay... esa amistad m da miedo...

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  3. Sí, bueno, inma, pero si un chico te da un beso sin tu permiso... aver como vas a tratarle cuando ni se arrepiente de ello... y bueno, y o tambn creo q me da algo de miedo su amistad maite

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