viernes, 15 de julio de 2011

Capítulo 3

Observé irritada, como mi hermana menor me traicionaba, hipnotizada por “los encantos” de nuestro nuevo hermano mayor. Y él parecía muy contento de haberme dejado sola en mi lucha contra él mismo. La pequeña Susana, montaba las piezas de colores una encima de otra, ayudada de la mano arquitecta de Greg, que las colocaba  muy centrado. Con el ceño fruncido continué leyendo boca abajo, encima de la cama.
-Tienes unas costumbres muy extrañas-comentó Greg con esa estúpida sonrisa suya y sin apartar la mirada de la construcción.- ¿no se te baja la sangre a la cabeza?
-Es una forma de concentrar la mente en dos cosas. Te hace más inteligente-murmuré sin moverme ni un ápice.
Apoyé el tronco en el suelo cuando me empecé a sentir incómoda, completamente doblada, con las piernas de la rodilla hacia abajo encima de la cama.
-¿En serio?-me preguntó él interesado.
-En realidad no-dije- me lo acabo de inventar.
Él me miró con cara extraña, pero no me esforcé en tratar de averiguar lo que se le pasaba por la cabeza. Como ya he dicho anteriormente, yo era una persona sencilla, de poca complejidad.
Esta mañana habían traído sus maletas y Greg se había instalado en el mi cuarto y en el de Susy. A mi hermana se le había antojado jugar con las piezas de construcción, y ahí estaban, jugando, mientras yo leía boca abajo. Por ahora la convivencia no había resultado muy molesta. La única que conseguía sacarme de mis casillas era Casandra. Había estado toda la mañana intentando entablar conversación conmigo, yo, la persona que más eludía la sociedad del mundo entero… y sabía que su intención era buena, pero pensaba que las cosas se templarían con el tiempo. Y eso era precisamente lo que yo necesitaba. Tiempo.
Entonces, en medio de mis pensamientos, noté como una especie de mareo, y me caí hacia un lado. Greg notó mi desfallecimiento y se acercó a ayudarme.
-¿Estás bien? Eso te pasa por ponerte así, si es que ya decía yo que no debía ser bueno…-farfulló.
-Normalmente no me pasa-me excusé-lo que pasa es que estoy pensando demasiado…
El soltó una carcajada.
-Seguro-puntualizó sin ni una pizca de ironía.
-Será mejor que me acueste un rato… llevo tiempo sin sentirme bien.-murmuré.
-¿Quieres que te ayude?-me preguntó.
Por un momento, noté que había cambiado, como si ya no fuera Greg, el Greg burlón, picarón y toca narices, y fuera otra persona. La imagen más idealizada que podía hacer de esa parte de él era la del hermano mayor. Cogí su mano y dejé que pasara la otra por mi cintura. A penas me levantó unos centímetros del suelo a la altura de la cama y me dejé suavemente encima de la colcha. Por unos minutos me sentí como una pluma en sus manos.
-Gracias-murmuré con tono seco.
Quería dejar claro, que a pesar de su amabilidad, seguía sin fiarme de él. Ni un pelo. Tumbada en la cama, observé como trataba con cariño a Susy, que parecía muy contenta de conseguir llamar su atención con el entretenido juego de las piezas.
Entonces, llamaron a la puerta.
-Adelante-murmuré somnolienta.
La puerta se abrió, y apareció una chica alta y de pelo castaño, liso, con unas gafas de sol blancas y vestida provocativamente. Se me revolvió aún más el estómago. Era justamente, el tipo de personas que me gustaba evitar.
-No me gustaría saber que me engañas con tu hermanastra-dijo riéndose y entrando como Pepe por su casa.
-¿Con cuál?-bromeó él pasando un brazo por encima de los hombros de la pequeña Susy, que tenía una cara de felicidad que me sentó como un puño.
La chica entró y fijó su vista en mí. Al principio pensé que me iba a dedicar una mueca o algo parecido al verme como una posible amenaza, pero en cambio, me sonrió contenta.
-¡Qué bien! Me da gusto conocer a mis nueras-exclamó acercándose a mí y cogiéndome de las manos.
Me incorporé e intenté aguantar el contacto físico con ella todo lo que pude sin poner cara de asco.
-Rosie y Susana, ¿no?-preguntó convencida.
-Ronnie.-espeté algo molesta.
-Qué bonito-exclamó ignorando por completo su equivocación y sin sentir ninguna vergüenza por ello.-Yo me llamo Julia. Seremos grandes amigas, estoy segura.
-Y yo-murmuré intentando hacer amago de una sonrisa.
Ella me respondió con el mismo gesto, y por un segundo, no sentí la necesidad de seguir fingiendo, sino de sonreír de verdad. Había algo en ella que me inspiraba confianza, como si sus palabras y sus acciones no fueran fingidas para quedar bien.
-¿Nos vamos?-preguntó ella dirigiéndose a Greg, que estaba concentrado en una gran torre de fichas de colores.
-¿Ahora? ¿No puedes quedarte un rato aquí  y luego nos vamos?-preguntó.
-Esperaré a que termines la torrecita-dijo con un tono que no permitía ser contradicho.
Él asintió con la cabeza, como un niño pequeño, y Susy la miró complacida. Genial. Se iba a quedar un ratito. Deseé con todas mis fuerzas que no intentara hablar conmigo pero mis súplicas no fueron escuchadas.
-Y… ¿cuántos años tienes?
-Quince.
-Uno menos que yo-dijo emocionada.- ¿Sabes qué? ¿Por qué no dejamos al tontaina este de Greg y nos vamos a dar un paseo? Luego volvemos.
Yo paseé la vista buscando la excusa perfecta para no ceder a su petición, pero ella tiró de mi brazo y no me pude negar.
-Venga, vístete. Si quieres te busco la ropa-exclamó abriéndome el armario.
Molesta, no la interrumpí mientras pasaba las perchas de un lado a otro, desesperada.
-¿Pero qué es esto? No había visto una ropa tan sosa en toda mi vida-me dijo casi enfadada.
Yo me encogí de hombros. Pocas veces salía de casa, excepto para ir a la biblioteca, correr y poco más. ¿Para qué necesitaba ropa bonita?
-Creo que con esta camiseta y estas mayas vas bien… o aceptable. Me parece que vamos a ir a buscarte algo bonito. Venga, ¡vamos!
-¿Pero cómo quieres que me vista con él delante?-pregunté sin levantar mucho la voz.
-Pues ve al baño,  ¡corre!
Con la ropa en el brazo me encerré con el pestillo. Estaba cabreada. ¿Por qué demonios tenía que salir yo ahora? Con lo a gusto que estaba en la cama… encima con el mareo… buf. Salí, cinco minutos después, con la ropa puesta. Fui a mi cuarto, donde me dejé observar incómoda.
-Es que eres tan guapa que todo te sienta bien-me dijo recalcando las palabras- que envidia…
Yo me rasqué la cabeza. No estaba acostumbrada a que me alagaran, pero de algún modo se sentía bien.
-Si está feísima-dijo Greg apoyándose en el hombro de su novia- parece una lámpara pasada de moda.
Me sonrojé de la furia pero preferí no responder. Pensé que la chica le miraría mal o algo, pero sólo le dedicó una mirada extraña, como si tratara de deducir lo que se escondía bajo esa careta de mastodonte alelado.
-En fin, vámonos-murmuró centrándose en mí y esbozando una sonrisa.
-Espera a que coja dinero-dije, y eché a correr.
Me quedé en frente de la hucha y la observé anhelante. El dinero destinado a mis libros. Con un suspiro la abrí y saqué un billete. Con eso sería bastante. Me esperaba una tarde movidita.


Volví derrotada. Me había llevado de compras por todo el centro, decidida a buscarme el conjunto perfecto para “estar aceptable”, como ella decía. Me había comprado un vestido azul claro “preciosísimo de la muerte” y unos zapatos con algo de tacón a juego. Estaba feliz y sonreía como una tontina como si el conjunto fuera para ella.
-¡Es que voy para estilista!-exclamaba cada dos por tres.
La verdad es que el conjunto no estaba mal, pero no me veía en él. Era demasiado bonito… para mí. Suspiré y lo dejé pasar. Entramos en casa, y nos metimos en mi cuarto. Greg estaba sentado en mi cama, observando cómo Susy bailaba dando círculos.
-¿Qué haces, Susana?-pregunté.
-Estaba enseñándole a Greg el nuevo baile que nos han enseñado en el colegio-me informó mientras seguía dando vueltas sobre sí misma.
-Es toda una princesa-dijo con orgullo.
Ella dio un saltito de alegría y continuó bailando hasta marearse. Yo me senté en la cama rendida, y le pegué una patada intencionada para echarle.
-Uy, perdón-dije inocentemente.
Él me fulminó con la mirada.
-Vámonos, Julia-dijo arisco- ya no tengo nada que hacer aquí.
Les miré mientras se iban, y cuando el cuarto se encontró casi vacío, excepto de mi presencia y la de Susy, pude respirar en paz. Intenté no ver la bolsa azul que había sobre la alfombra pero no pude. Me levanté a encender el aparato de música y puse mi canción favorita en tono suave, no demasiado alta.
-Nananana-cantó Susy deshaciéndose de sus zapatos, subiéndose a la cama y acurrucándose junto a mí.
-Es la hora de comer, Susana-dije con un suspiro mientras trataba de escuchar la canción- no te duermas.
Pero a los diez segundos, podía oír su lenta respiración y ver sus ojos cerrados. Me levanté y me asomé a la ventana. Ellos estaban saliendo de casa. Sin querer observé cómo Julia pasaba los brazos por su cuello y empezaba a besarle, como si se hubiera resistido durante mucho tiempo y no pudiera evitarlo.
I hope you know, I hope you know
That this has nothing to do with you
It's personal, Myself and I
We've got some straightenin' out to do
And I'm gonna miss you like a child misses their blanket
But Ive got to get a move on with my life
Its time to be a big girl now
And big girls don't cry
Don't cry
Don't cry
Don't cry

8 comentarios:

  1. IMPRESIONANTE. SIMPLEMENTE IMPRESIONANTE. Deberias dedicarte a esto baby, te lo digo enserio.

    Espero el siguiente capi ^^ Me a encantado este! (L)

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  2. Me da a mi que habrá pique entre Julia y Ronnie... jejeje xD
    Espero ansiosa el próximo capituloo!! :D

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  3. ME ENCANTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!
    Sigue escribiendo,por faaaaaaaaaaaaaaaa :)
    Besos!

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  4. AWWW precioso capítulo! Me agradó mucho Julia, excepto porque es la novia de Greg jaja Pero es que... no sé, me dio una sensación conocida al leer la parte de verles besarse, bueno, nada, me fascinó, espero el próximo ^^
    Girl

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  5. la verdad es que Julia parece bastante maja, pienso igual que Girl, me cae muy bien pero teniendo en cuenta que es la novia de Greg :S
    Bsoos

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  6. A mí el que me empieza a caer mal es el tal Greg, me contradigo, lo sé x)
    Julia me gusta ^^
    ME ENCANTÓ EL CAP!! Espero ansiosa el siguiente *O*
    Saludos!!

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  7. Esa Julia no me da a mi muy buena espero que no se esté haciendo la buena para luego hacer que es la victima y tam,bién me dejastes muy intrigada con lois mareos de Ronnie.
    Estuvo muy interesante.
    Cuídate besos.

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  8. Geniiiiial*-*
    Julia parece bastante maja, la verdad, espero que sea buena chica, y Greg no es tan idiota como parece en el fondo, ¿no?

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